Hoy he llegado sobre las 3:30 y mientras comía he puesto las noticias, bueno más bien el deporte de los informativos… Luego he fregado y me he puesto a reír yo sola al recordar algo pasado. Es normal este fenómeno en mí, es decir el reírme yo sola con situaciones, o hechos que me han ocurrido… ¿Loca? Puede ser, pero una loca alegre…
Pues bien, me ha venido a la mente la vez que tuve que ir a urgencias porque me quemé las yemas de los dedos de ambas manos. Visto así, no parece que haga mucha gracia…pero visto desde la lejanía hace que sonría al recordarlo (estuve mal unos días; no fue nada grave), porque mientras ‘moría’ de dolor…lloraba de risa.
Me acuerdo que era un viernes por la noche y como todos los viernes pues ese día tocaba pizza. Yo, como siempre, la puse en el horno para que se hiciera, y la retiré con las manoplas para ponerla en la encimera… Hasta ahí, lo normal creo yo.
Pero como a veces voy ‘acelerada’ y pienso en otras cosas…pues pasó lo que tenía que pasar. Convencida de que había cambiado el plato que había sacado del horno pues cogí con ambas manos el plato por debajo dejando al descubierto los dos dedos gordos de ambas manos…
En los cinco primeros segundos me quedé sin moverme con el plato cogido con ambas manos. No sentí nada…En el sexto ya sí….Solté el plato y chillé. Ahí me di cuenta que me había quemado y bastante. Empecé a mover las manos con rapidez para evitar sentir el dolor que iba aumentando en cuestión de segundos…No lo podía aguantar… Y sentí un profundo mareo.
Mi primera reacción fue pedir que me echaran pasta de dientes (porque siempre me habían dicho que eso calmaba las quemaduras), pero mi madre me dijo que lo mejor era partir una patata y pasarla por la zona afectada. Vamos, lo que se llama remedios caseros, que claro alguna vez deben de funcionar, digo yo, pero a mí no me funcionó. Pero yo con tal de no sentir aquel dolor me llené los dedos de pasta de dientes y me fui a urgencias con la patata en la mano…
La imagen no podía ser más ridícula pero no me importaba. Yo llegué a urgencias con mi patata en la mano y rabiando de dolor… Afortunadamente me cogieron rápido, aunque cueste de creer, pero sí, me llamaron a los pocos minutos de estar en aquella sala donde el dolor se percibía nada más entrar.
Me dijeron que esperara en una habitación y que me atendería una enferma. Yo pensé, sí, sí…una enfermera, un abogado, una bailarina….me daba igual, sólo quería que me pusieran algo para no sentir el dolor, porque ya no lo aguantaba! ! Ya no sentía mis dedos, sólo sentía dolor.
A los cinco minutos entró un enfermero (gracioso), que creo que no chilló por vergüenza al verme las manos…
- ¿Qué te ha pasado? ¿Qué es eso verde? Y ¿la patata? Dios mío….estas abuelas ( supongo que lo diría por los tan conocidos remedios de la abuela)
La verdad es que ahí fue cuando miré mis manos….Diosss tenía razón. Tenía toda la pasta reseca mezclada con el líquido que suelta la patata... Me sentí avergonzada y por primera vez, me olvidé del dolor.
- Ahh, esto verde es pasta de dientes y lo otro….una patata – dije mientras veía que me subían los colores.
A mí me subieron los colores , pero al enfermero mucho más...
- ¿Con qué te has quemado?
- Pues ahora te volverás a reír….Pero con un plato caliente recién sacado del horno…
- ¿En serio? ¿ Pero cómo? Uff que dolor… Bueno tranquila, lávate las manos en ese grifo y la doctora te mirara las quemaduras..
- Gracias…
Mientras el enfermero apuntaba en el informe yo me dirigí hacia donde estaba el grifo. Solté mi patata y puse una mano bajo el grifo mientras con la otra abría el agua.
- Ahhhhh…..- chillé con todas mis fuerzas sin pensar que estaba en urgencias.
- Ayy perdona, lo siento…se me olvidó decirte que estaba puesto el agua caliente…Tranquila, no pasa nada…
¿Qué no pasa nada? Claro como sus dedos no eran… Tenía los dedos al rojo vivo y encima me eché agua caliente…
- Lo siento…Ahora quédate un buen rato con las manos bajo el agua fría que te irá bien y te aliviara…
Pues bien, me ha venido a la mente la vez que tuve que ir a urgencias porque me quemé las yemas de los dedos de ambas manos. Visto así, no parece que haga mucha gracia…pero visto desde la lejanía hace que sonría al recordarlo (estuve mal unos días; no fue nada grave), porque mientras ‘moría’ de dolor…lloraba de risa.
Me acuerdo que era un viernes por la noche y como todos los viernes pues ese día tocaba pizza. Yo, como siempre, la puse en el horno para que se hiciera, y la retiré con las manoplas para ponerla en la encimera… Hasta ahí, lo normal creo yo.
Pero como a veces voy ‘acelerada’ y pienso en otras cosas…pues pasó lo que tenía que pasar. Convencida de que había cambiado el plato que había sacado del horno pues cogí con ambas manos el plato por debajo dejando al descubierto los dos dedos gordos de ambas manos…
En los cinco primeros segundos me quedé sin moverme con el plato cogido con ambas manos. No sentí nada…En el sexto ya sí….Solté el plato y chillé. Ahí me di cuenta que me había quemado y bastante. Empecé a mover las manos con rapidez para evitar sentir el dolor que iba aumentando en cuestión de segundos…No lo podía aguantar… Y sentí un profundo mareo.
Mi primera reacción fue pedir que me echaran pasta de dientes (porque siempre me habían dicho que eso calmaba las quemaduras), pero mi madre me dijo que lo mejor era partir una patata y pasarla por la zona afectada. Vamos, lo que se llama remedios caseros, que claro alguna vez deben de funcionar, digo yo, pero a mí no me funcionó. Pero yo con tal de no sentir aquel dolor me llené los dedos de pasta de dientes y me fui a urgencias con la patata en la mano…
La imagen no podía ser más ridícula pero no me importaba. Yo llegué a urgencias con mi patata en la mano y rabiando de dolor… Afortunadamente me cogieron rápido, aunque cueste de creer, pero sí, me llamaron a los pocos minutos de estar en aquella sala donde el dolor se percibía nada más entrar.
Me dijeron que esperara en una habitación y que me atendería una enferma. Yo pensé, sí, sí…una enfermera, un abogado, una bailarina….me daba igual, sólo quería que me pusieran algo para no sentir el dolor, porque ya no lo aguantaba! ! Ya no sentía mis dedos, sólo sentía dolor.
A los cinco minutos entró un enfermero (gracioso), que creo que no chilló por vergüenza al verme las manos…
- ¿Qué te ha pasado? ¿Qué es eso verde? Y ¿la patata? Dios mío….estas abuelas ( supongo que lo diría por los tan conocidos remedios de la abuela)
La verdad es que ahí fue cuando miré mis manos….Diosss tenía razón. Tenía toda la pasta reseca mezclada con el líquido que suelta la patata... Me sentí avergonzada y por primera vez, me olvidé del dolor.
- Ahh, esto verde es pasta de dientes y lo otro….una patata – dije mientras veía que me subían los colores.
A mí me subieron los colores , pero al enfermero mucho más...
- ¿Con qué te has quemado?
- Pues ahora te volverás a reír….Pero con un plato caliente recién sacado del horno…
- ¿En serio? ¿ Pero cómo? Uff que dolor… Bueno tranquila, lávate las manos en ese grifo y la doctora te mirara las quemaduras..
- Gracias…
Mientras el enfermero apuntaba en el informe yo me dirigí hacia donde estaba el grifo. Solté mi patata y puse una mano bajo el grifo mientras con la otra abría el agua.
- Ahhhhh…..- chillé con todas mis fuerzas sin pensar que estaba en urgencias.
- Ayy perdona, lo siento…se me olvidó decirte que estaba puesto el agua caliente…Tranquila, no pasa nada…
¿Qué no pasa nada? Claro como sus dedos no eran… Tenía los dedos al rojo vivo y encima me eché agua caliente…
- Lo siento…Ahora quédate un buen rato con las manos bajo el agua fría que te irá bien y te aliviara…
Y sí, poco a poco…fui notando mis dedos, y no el dolor.
Al poco tiempo, vino la doctora y me miró las manos… En todas las yemas (bueno el dedo gordo de ambas manos lo tenía bien) tenías grandes ampollas. Me dijo que me tenía que haber echado agua nada más quemarme (porque recompone la piel quemada), pero sinceramente siempre creí que el agua era lo peor para las quemaduras. Me recetó una pomada ( por cierto, que me fue muy bien) y unos analgésicos para el dolor.
- Ahora vendrá el enfermero y te vendará los dedos,…pero antes de dormir te quitas las vendas..
- Gracias!
Vino de nuevo el mismo enfermero y me echó la pomada que me había recetado y me vendó los dedos que tenía peor.
- Esto, luego te lo quitas vale? Uff Algunos te dolerán muchísimo….
- Sí, no te voy a mentir…Sobre todo el del medio…
- Es que en la yema de los dedos duele muchísimo…
- Me lo dices o me lo cuentas- dije bromeando.
La verdad es que la pomada me alivió muchísimo, pero seguía teniendo muchísimo dolor…menos, pero dolor.
Una vez me vendó los dedos que tenía peor, me miré y... me dio la risa, lo siento. Me ví ahí con los dedos vendados, la patata en la camilla, el enfermero con la sonrisita puesta… que me dio la risa. Cuando ya me disponía a salir de aquella habitación con olor a hospital, el enfermero me dijo:
- Perdona, te dejas una cosa…
- ¿El qué?
- Tu patata..
Eché la carcajada del siglo…
- Tranquilo, la puedes tirar…
- Vale...
- Ahh….y otra cosa.
- Dime…
- La próxima vez ponte guantes….
Y me alejé por el pasillo entre camillas y batas blancas.
Comentario: Aunque sé que lo que he escrito no es para tomárselo en broma...es una manera de 'quitar hierro al asunto' y tomármelo de la mejor manera posible, ya que al final no resultó nada grave...
Al poco tiempo, vino la doctora y me miró las manos… En todas las yemas (bueno el dedo gordo de ambas manos lo tenía bien) tenías grandes ampollas. Me dijo que me tenía que haber echado agua nada más quemarme (porque recompone la piel quemada), pero sinceramente siempre creí que el agua era lo peor para las quemaduras. Me recetó una pomada ( por cierto, que me fue muy bien) y unos analgésicos para el dolor.
- Ahora vendrá el enfermero y te vendará los dedos,…pero antes de dormir te quitas las vendas..
- Gracias!
Vino de nuevo el mismo enfermero y me echó la pomada que me había recetado y me vendó los dedos que tenía peor.
- Esto, luego te lo quitas vale? Uff Algunos te dolerán muchísimo….
- Sí, no te voy a mentir…Sobre todo el del medio…
- Es que en la yema de los dedos duele muchísimo…
- Me lo dices o me lo cuentas- dije bromeando.
La verdad es que la pomada me alivió muchísimo, pero seguía teniendo muchísimo dolor…menos, pero dolor.
Una vez me vendó los dedos que tenía peor, me miré y... me dio la risa, lo siento. Me ví ahí con los dedos vendados, la patata en la camilla, el enfermero con la sonrisita puesta… que me dio la risa. Cuando ya me disponía a salir de aquella habitación con olor a hospital, el enfermero me dijo:
- Perdona, te dejas una cosa…
- ¿El qué?
- Tu patata..
Eché la carcajada del siglo…
- Tranquilo, la puedes tirar…
- Vale...
- Ahh….y otra cosa.
- Dime…
- La próxima vez ponte guantes….
Y me alejé por el pasillo entre camillas y batas blancas.
Comentario: Aunque sé que lo que he escrito no es para tomárselo en broma...es una manera de 'quitar hierro al asunto' y tomármelo de la mejor manera posible, ya que al final no resultó nada grave...
Aileon
23 comentarios:
:O :O ligando con el enfermero! Yo tengo un montón de anécdotas con enfermeras cuando estuve ingresado, sobre todo con las de prácticas. Bien me reía.
Ligando? noooo...eso es mi encanto natural, porque ligar vamos...entre los dedos vendados y la patata por ahí...como que no!!!
Pues ya sabes algún día podrías contar esas anécdotas de las que hablas...
Intuyo que ya estás mejor , y me alegro muchísimo...
Cuídate!
Jajaja yo sí que me río, porque si contara las veces que he estado en urgencias a altas horas de la madrugada y por diversos y extraños motivos te mueres de la risa:
-me caí de una pelota gigante en las fiestas de un pueblo y me rompí el brazo (las 2 de la mañana)
-me empezó a sangrar la garganta en un suceso que el propio médico calificó de paranormal, que incluso llamó a los médicos en prácticas para que viesen como me hacía en vivo una cura con nitrato de plata ( las cuatro de la mañana)
-me rompí los labios y los dientes con un bate de béisbol; esta vez eran las nueve de la noche, pero llevaba ya un esguince en la pierna derecha, con lo que parecía una pequeña mutilada...
Y espera que me acuerde de más...
Ah, ya te he contestado en mi blog,pero te lo repito por si no lo lees: que la segunda copia de mi libro de poemas es para ti ( es que la primera es para ese tal RAyco que si no se enfada... jajaj)
VAya que también tienes historias en hospitales..que bueno!
Pero por lo que veo poco graves..mejor!!
Sí, acabo de leer tu blog..
Muy mal por Rayco..que la idea ha sido mía ,muy mal!!! Pero me conformo con la segunda copia para mí...jeje
Pero lo entiendo jejeje
Ya no he querido opinar que la conversación vuestra es muy bonita...
Cuídate!!
jajaja si creo que bonita no es la palabra para definir nuestra conversación! no interrumpes!!
Lo mismo un día nos encontramos tú y yo por el hospital de urgencias jeje, en fin, historias para no dormir, pero luego bien que nos reímos, verdad?
Jajaja joe, las mías no llegan a tanto jajaja. ¿Qué les habrá dicho el médico a los de prácticas? Seguidme! Por aquí está la rara.... jajajaja
Sí, sí....eso es verdad!
Bueno me he quedado con tu cara así que te reconocería jejje Pero vamos mejor vernos en otro sitio jeje
Bueno prefiero no 'interrumpir' el buen rollito que tenéis porque además me encanta leeros a los dos... Y tres son multitud jeje
La verdad es que pocos blogs leo.. pero para mí los suficiente.
Y creo que los que más visito sin duda es el de Rayco, el tuyo y el de otra chica...a la que leo pero nunca he opinado. Me preocupa su historia...pero en fin, que aunque no nos conozcamos pues una tiene cariño...
Os seguiré leyendo, con vuestro permiso...
Quién es la rara? :(((
Uyy No lo había leído bien
Pobre Nalia...
¡Qué honor por lo de mi blog!
No sé si te habrás fijado noe...aileon, yo tengo buen rollo con todo el mundo. Lo malo es darme cuerda jajaja
Sí,sí me he fijado...pero eso es bueno!!! Y por mi parte me gusta leer tu blog y los comentarios que haces a los demás blogs...
Me puedes llamar Noelia, si quieres...ya hay cierta confianza jejeje... Y lo del blog es verdad...y el de Nalia también me parece muy interesante!
Por cierto, como se llama tu sobrina?? que dijiste algo de el nombre de Marta ( creo) y el mío...
si, aileon, la rara era yo... en fin!! Tres no son multitud, cuántos mas mejor, jaja, además es lo que dice Rayco, que si le das cuerda no para, como los relojes...
jejejejejej
Qué bueno...no calla el chico, bueno no deja de teclear jejjejeje ( es broma Rayco)...
Pues eso, se llama Marta y luego tu nombre. ;-)
Claro aileon, si Nalia lo que quiere es que alguien me hable para que la deje en paz.¿No lo notas?
Que no Rayco que no es eso jajaja que me lo paso muy bien contigo!!
Buenas noches a los dos!!! Y besos!
jejejeej
No, no....ella está encantada de hablar contigo, que me lo ha dicho jejejejeje
Buenas noches, Nalia
¡Descansa...!
Por cierto, hoy me habéis estresado...ir de un blog a otro..
Besos!
Jajaja. ¿Ah, sí? ¿Y ese hilo directo? jajajaja.
Que descanses!
Ahhh...cosas de chicas, que tenemos hilos en común ( es broma)
Descansa y espero que mñn estés mejor...
Besos!
Mmmmm jajaja me quedaré con la duda,
¡Qué descanses, ligona de enfermeros!! ;-)
Bona nit!
Quédate tranquilo :(((
jejejejejejeejejjee
Hasta mñn! Cuídate
Yo he acabado con un inventario de golpes, quemaduras y cortes bastante elevado este ultimo año!
Quemadura! Lo primero... Agua fria, mucha agua fria...
Despues... En casa, como si fueran aspirinas! TEner un botecito de SILVEDERMA... Imprescindible y no es caro... En mi empresa hay soldadura a monton... se lo que te digo!!
RAyco celoso de enfermeros!!!
Dios mio!
Necesito el Sabado!!!
;-)
Publicar un comentario