Hoy ha sido un día maldito. Peor...imposible.
Lo que en un principio iba a ser un día en familia, entretenido, disfrutando del paisaje, se ha convertido en un día de sucesos tras sucesos, y no precisamente buenos (tampoco graves)
Hoy, como otros tantos domingos, hacían una cursa de bici cerca de mi refugio. Esta vez, no sólo participaba mi cuñado, sino también el nene. Iríamos todos a la cursa, luego comeríamos carne a la brasa, nos echaríamos la siesta junto al fuego, y a media tarde, nos vendríamos para casa. Ese era el plan.
La realidad ha superado a los planes.
A las 6:30 le digo al nene:
- Nene, ¿lo oyes?
- ¿El qué?
- No veas como llueve…
- ¿Así? Yo no oigo nada…
- Sí, sí….Entonces no se hará la cursa ¿no?
- Pues no lo sé.
Y ya no nos hemos dormido. El gris se apoderaba del cielo, y la lluvia del suelo.
A las 8 todos en pie. Frío y lluvia en el exterior. Fuego a tierra y manta en el interior. Cualquiera se iba de ahí…
A las 9 ellos con el casco puesto, y nosotros con el paraguas mojándonos. Anuncian que la cursa no se aplaza y que el recorrido es bastante duro. Ellos se mezclan entre gotas y sueño, nervios, y frío. Salen los 400… Nosotros vamos al almorzar. El maldito día sólo hace que empezar...
Volvemos a la hora, porque está a punto de llegar el primero. Llueve con mucha fuerza y apenas vemos las montañas. El gris cubre todo lo que ven nuestros ojos. Yo sufro por el nene porque sólo ha ido a una cursa de éstas. Con paraguas (yo no) y frío pasamos los minutos como podemos…Así dos horas.
Con zapatos inapropiados, apenas puedo caminar porque me sale una ampolla en cada pie. Ni tiritas ni nada me alivian el dolor. Aguanto como puedo, y me lamento sin poder.
Mi sobrino, un puro nervio, entre gotas que calan, lluvia que moja, dice que tiene mucho frío. Y se empieza a encontrar mal. Mi padre se lo lleva al coche…
A las dos horas de estar esperando, y con lluvia en nuestros ojos, respiro mientras veo a lo lejos al nene (tengo buena vista y lo identifico con rapidez). Cansado, empapado, lleno de barro, me dice que ha sido lo peor y muy dura. Seguimos esperando…y la lluvia también.
A la media hora, comienza el diluvio, y nosotras preocupadas por mi cuñado. Con frío, con aire que hace inútil a los paraguas, y las ganas de llegar a casa, con el fuego a tierra, pasan muchos, menos él.
Lo que en un principio iba a ser un día en familia, entretenido, disfrutando del paisaje, se ha convertido en un día de sucesos tras sucesos, y no precisamente buenos (tampoco graves)
Hoy, como otros tantos domingos, hacían una cursa de bici cerca de mi refugio. Esta vez, no sólo participaba mi cuñado, sino también el nene. Iríamos todos a la cursa, luego comeríamos carne a la brasa, nos echaríamos la siesta junto al fuego, y a media tarde, nos vendríamos para casa. Ese era el plan.
La realidad ha superado a los planes.
A las 6:30 le digo al nene:
- Nene, ¿lo oyes?
- ¿El qué?
- No veas como llueve…
- ¿Así? Yo no oigo nada…
- Sí, sí….Entonces no se hará la cursa ¿no?
- Pues no lo sé.
Y ya no nos hemos dormido. El gris se apoderaba del cielo, y la lluvia del suelo.
A las 8 todos en pie. Frío y lluvia en el exterior. Fuego a tierra y manta en el interior. Cualquiera se iba de ahí…
A las 9 ellos con el casco puesto, y nosotros con el paraguas mojándonos. Anuncian que la cursa no se aplaza y que el recorrido es bastante duro. Ellos se mezclan entre gotas y sueño, nervios, y frío. Salen los 400… Nosotros vamos al almorzar. El maldito día sólo hace que empezar...
Volvemos a la hora, porque está a punto de llegar el primero. Llueve con mucha fuerza y apenas vemos las montañas. El gris cubre todo lo que ven nuestros ojos. Yo sufro por el nene porque sólo ha ido a una cursa de éstas. Con paraguas (yo no) y frío pasamos los minutos como podemos…Así dos horas.
Con zapatos inapropiados, apenas puedo caminar porque me sale una ampolla en cada pie. Ni tiritas ni nada me alivian el dolor. Aguanto como puedo, y me lamento sin poder.
Mi sobrino, un puro nervio, entre gotas que calan, lluvia que moja, dice que tiene mucho frío. Y se empieza a encontrar mal. Mi padre se lo lleva al coche…
A las dos horas de estar esperando, y con lluvia en nuestros ojos, respiro mientras veo a lo lejos al nene (tengo buena vista y lo identifico con rapidez). Cansado, empapado, lleno de barro, me dice que ha sido lo peor y muy dura. Seguimos esperando…y la lluvia también.
A la media hora, comienza el diluvio, y nosotras preocupadas por mi cuñado. Con frío, con aire que hace inútil a los paraguas, y las ganas de llegar a casa, con el fuego a tierra, pasan muchos, menos él.
A las tres horas, y cuando apenas quedaba gente, veo a lo lejos a mi cuñado que va moviendo la cabeza (digo veo por el zoom de la cámara). Intuyo que algo no va bien. Se aproxima a nosotros y vemos que tiene una buena rascada en la barbilla y le sangra bastante, y nos dice que se ha caído y que le duele el cuello y la mano. Le curan la herida y le dicen que vaya urgencias.
Llegamos a casa, con frío, mojados, y buscamos con desesperación un hueco delante del fuego. Comemos, intentamos descansar , y a media tarde decidimos que ya es hora y nos venimos para casa. Llueve de nuevo con más fuerza que nunca. Apenas vemos la carretera, y 15 minutos se convierten en una eternidad. Nos pasamos nuestra salida en la autopista ...Y tenemos que recorrer más kilómetros para luego volver para atrás…
Llego a casa. El nene se va a la suya. Mis padres aún no han llegado. Y pienso que hoy ha sido un día maldito y que mejor olvidarlo cuanto antes…
Resultado final:
Las ampollas me duelen más ahora que esta mañana, mi sobrino tiene 39 de fiebre, mi abuela se ha caído esta mañana (pero está bien), el nene se resfriará porque no se encuentra muy bien, y mi cuñado tiene una buena rascada en la cara, lleva collarín y tiene un esguince en el dedo…¿Algo más? No, gracias…
Ha sido un día duro, mojado y sufrido, pero aún así, me quedo con el sábado por la noche. Cenando, risas, más risas, hablando, recordando…Y todos alrededor del fuego…
Sobre las 12 de la noche salí fuera...Sola, en la oscuridad de la noche, la luna me eclipsa. La observo y la inmortalizo con mi cámara ( por cierto, impresionantes fotografías me salieron).
Llegamos a casa, con frío, mojados, y buscamos con desesperación un hueco delante del fuego. Comemos, intentamos descansar , y a media tarde decidimos que ya es hora y nos venimos para casa. Llueve de nuevo con más fuerza que nunca. Apenas vemos la carretera, y 15 minutos se convierten en una eternidad. Nos pasamos nuestra salida en la autopista ...Y tenemos que recorrer más kilómetros para luego volver para atrás…
Llego a casa. El nene se va a la suya. Mis padres aún no han llegado. Y pienso que hoy ha sido un día maldito y que mejor olvidarlo cuanto antes…
Resultado final:
Las ampollas me duelen más ahora que esta mañana, mi sobrino tiene 39 de fiebre, mi abuela se ha caído esta mañana (pero está bien), el nene se resfriará porque no se encuentra muy bien, y mi cuñado tiene una buena rascada en la cara, lleva collarín y tiene un esguince en el dedo…¿Algo más? No, gracias…
Ha sido un día duro, mojado y sufrido, pero aún así, me quedo con el sábado por la noche. Cenando, risas, más risas, hablando, recordando…Y todos alrededor del fuego…
Sobre las 12 de la noche salí fuera...Sola, en la oscuridad de la noche, la luna me eclipsa. La observo y la inmortalizo con mi cámara ( por cierto, impresionantes fotografías me salieron).
En silencio, me ausento durante varios minutos…
Entro en casa con una sonrisa, y me uno a sus risas…
Aileon
Entro en casa con una sonrisa, y me uno a sus risas…
Aileon
9 comentarios:
Pues vaya,un domingo malo entonces,hay dias que es mejor no levantarse
A recuperarse todos bien rapido
cuidate esas ampollas
un abrazo
Es un día familiar, ¿qué podías esperar? jajaja.
Una cosa, una cursa es como un maratón, ¿no?
Por lo menos llueve que se necesita... hay que mirar lo positivo.
Al mal tiempo buena cara no ?,xD
Quedate solo con el sabado y esos buenos momentos :)
Anónimo:
Malo sí, bastante! Pero bueno, a ver que tal estamos todos mañana! porque vamos...Lo que hay que sufrir jeje
Mis ampollas ahí van las jodias!!! jeje Si es que...Me olvidé las bambas así que ..toma zapato!!!!
Cuídate!
RAyco:
Bueno mis días familiares no son así, desde luego. Risas si, pero vamos, mejor no tener que ir al hospital!!!
Si, hay que ser positivo y es tema primoridal que llueva,pero vamos lo que menos pensaba cuando estaba allí, era en que se necesitaba agua jeje. Eso seguro...
Sí, solo que en mountain bike!
Despues de la lluvia.... siempre sale el sol
Vaya que me has entretenido leyendote y e entendido muy bien al final del texto la imagen de la Luna y vos observandola (por ejmplo) jeje
Sabes lo malo de un día es lo malo que pasa y es decir, todos (las personas) planeamos lo bueno del día, y le dejamos al destino lo malo del día, eso que no quisieramos recordar que podria pasar, pero cuando pasa, todo depende de cuan preparados estabamos para ese suceso, pero si no fue algo garve pues, entonces es parte de la aventura y al final, una anecdota que contar, divertida o no, pero emocionante sin lugar a dudas jeje.Yo me iria más seguido a campar si no existieran los mosquitos =ODIO LOS MOSQUITOS=
Soy muy delicado en ese aspecto(bueno y muchas más jeje)pero no es el caso contarlos todos ¿o sí?
Saludos Aileon
"Si no fuera por estos momentos que triste seria mi vida"
FRASE DE AILEON!!!
:=)
Me sorprende que dos personas que viven tan lejos el uno con el otro (casi del otro lado del globo) tengan tanto en común, como si de vecinos se trataran (algo de sentido figurado porque no les hablo a mis vecinos jejeje).¿Que opineis vos de eso?que acabad de escuchad.Jejeje (Me encanta escribir así jeje).
Tiene que haber días malditos para que apreciemos más los días que después no tocan maravillosos Me alegro de ver que el sábado por la noche estabas mejor y animada, que me he asustau un pokito al leer tu anterior entrada, niña Dicen que después de la tormenta siempre llega la calma y, por aquí en algunos puertos, los pescadores añaden y con la calma se ve el destrozo Aun así hay que animarse, pensar en positivo y pasar página cuanto antes, que no olvidar Así se superan las cosas Guardate ese rato con la luna, seguro que le contaste más de un secreto, a mi siempre me pasa Y espero ver esas fotos...que seguro son elegantes
Me alegro de ver que te encuentras mejor, espero que la semana empiece bien y te levantes con una sonrisa enorme Muxus Noe, cuidate mucho & Rekuerdos del niño triste!!
Anónimo: Eso intento quedarme con las cosas buenas, eso seguro!! Hoy no pienso lo mismo. Hay veces que sonreír y quedarte con lo positivo no puedes...
Cuídate!
Hoy quiero contarte: Dicen que después de la lluvia sale el sol, dicen y es verdad, aunque no siempre suele ser así.
Gracias por pasarte! Cuídate!
Edgar: Me alegro que te haya entretenido. La verdad es que no suelo hacer planes y está demostrado que siempre acabo haciendo lo que no he planeado. En parte mucho mejor, mas emoción al no saber lo que te espera...
Yo también odio los mosquitos, y parecen que todos vengan a mí. En verano lo paso realmente mal...Tengo que vivir con ello, y con más bichos que me fastidian jeje
A veces la distancia, te aproxima a los demás...esté donde esté!
Cuídate!
Isuntza: Tranquilo, no hay motivo para asustarse. Lo mejor el sábado y lo recuerdo con una sonrisa en los labios, aunque hoy me cuesta por otro motivo.
La semana no ha empezado nada bien, ahora pondré una entrada sobre eso.
Cuídate!
Saludos a todos!
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